Leucemia En La Infancia: Cáncer Hematológico
¿QUÉ ES LA LEUCEMIA O CÁNCER HEMATOLÓGICO?
La leucemia es el cáncer de la sangre y se desarrolla en la médula ósea. La médula ósea es el tejido esponjoso que se encuentra en el centro de los huesos grandes del cuerpo y que produce las tres principales células de la sangre:
Glóbulos blancos (que combaten las infecciones), glóbulos rojos (que transportan oxígeno) y plaquetas (que detienen las hemorragias y permiten que la sangre coagule).
Por razones que se desconocen, la médula ósea de un niño con leucemia produce glóbulos blancos que leucemia, estas células no responden a dichas señales y se reproducen, independientemente del espacio.
no maduran correctamente, pero que continúan reproduciéndose. Las células sanas y normales se reproducen sólo cuando hay espacio suficiente para ellas. El cuerpo puede regular la producción de células enviando señales que indican cuándo ésta debe detenerse. En el caso de la Estas células anormales se reproducen muy rápidamente y no funcionan como glóbulos blancos sanos, cuya tarea es combatir las infecciones. Cuando los glóbulos blancos inmaduros, llamados blastos, comienzan a desplazar a las células sanas de la médula ósea, el niño experimenta los síntomas de la leucemia (infecciones, anemia, sangrado).
¿A QUIENES AFECTA LA LEUCEMIA?
La leucemia es el tipo de cáncer más común en la infancia. Esta enfermedad puede manifestarse a cualquier edad, aunque es más frecuente en los niños entre 2 y 6 años de edad. La leucemia se presenta con una frecuencia ligeramente mayor en los varones que en las mujeres y es más común en niños caucásicos que en niños africano-americanos o de otras razas.
¿CUALES SON LOS SÍNTOMAS DE LA LEUCEMIA?
Debido a que la leucemia es el cáncer del tejido que produce las células sanguíneas, los síntomas iniciales generalmente se relacionan con el funcionamiento irregular de la médula ósea. Ésta es la responsable de almacenar y producir alrededor del 95% de las células sanguíneas, incluidos los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las plaquetas.
Cuando se presenta la leucemia, los glóbulos blancos anormales (blastos) comienzan a reproducirse muy rápidamente, desplazan a las demás células sanas y compiten con ellas por los nutrientes y el espacio. A continuación se enumeran los síntomas más comunes de la leucemia. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:
ANEMIA:
La anemia se presenta cuando la médula no puede producir glóbulos rojos debido a la gran concentración de células en ella. Las características de un niño con anemia son su aspecto de cansancio, palidez y respiración acelerada para compensar la disminución de la capacidad de transporte de oxígeno. En un recuento sanguíneo, la cantidad de glóbulos rojos será inferior a lo normal.
Sangrado y moretones:
Cuando la médula no puede producir plaquetas debido a la gran concentración de células que hay en ella, pueden presentarse sangrados o moretones con mayor facilidad. Las petequias son diminutos puntos rojos en la piel del niño con una cantidad insuficiente de plaquetas. Son pequeños vasos sanguíneos que han "goteado" o sangrado. En un recuento sanguíneo, la cantidad de plaquetas será inferior a lo normal. El término con que se denomina el bajo nivel de plaquetas es trombocitopenia.
Infecciones recurrentes:
Si bien el recuento sanguíneo de un niño con leucemia puede arrojar una cantidad inusitadamente alta de glóbulos blancos, estos son inmaduros y no pueden combatir las infecciones. El niño puede haber tenido infecciones virales o bacteriales repetitivas en las dos semanas anteriores. Una persona con leucemia generalmente manifiesta los síntomas de una infección como por ejemplo, fiebre, goteo nasal y tos.
Dolor en los huesos y las articulaciones:
Los dolores en los huesos y las articulaciones son otros síntomas comunes de la leucemia. Generalmente, este dolor es consecuencia de que la médula está superpoblada y "llena".
Dolor abdominal:
Los dolores abdominales también pueden ser un síntoma de la leucemia. Las células de la leucemia pueden acumularse en los riñones, el hígado y el bazo, y generar el agrandamiento de estos órganos. El dolor abdominal puede provocar que el niño pierda el apetito y peso.
Inflamación en los ganglios linfáticos:
El niño también puede presentar inflamación en los ganglios linfáticos que se encuentran debajo de los brazos, la ingle, el pecho y el cuello. Los ganglios linfáticos son los responsables de filtrar la sangre. Las células de la leucemia pueden acumularse en los ganglios y provocar una inflamación.
Dificultad para respirar (disnea):
En los casos de ALL de células T, las células tienden a aglomerarse alrededor del timo. Esta masa de células en el centro del pecho puede causar dolor y dificultad para respirar (disnea). La sibilancia, la tos o el dolor al respirar requieren de atención médica inmediata.
La leucemia es el cáncer de la sangre y se desarrolla en la médula ósea. La médula ósea es el tejido esponjoso que se encuentra en el centro de los huesos grandes del cuerpo y que produce las tres principales células de la sangre:
Glóbulos blancos (que combaten las infecciones), glóbulos rojos (que transportan oxígeno) y plaquetas (que detienen las hemorragias y permiten que la sangre coagule).
Por razones que se desconocen, la médula ósea de un niño con leucemia produce glóbulos blancos que leucemia, estas células no responden a dichas señales y se reproducen, independientemente del espacio.
no maduran correctamente, pero que continúan reproduciéndose. Las células sanas y normales se reproducen sólo cuando hay espacio suficiente para ellas. El cuerpo puede regular la producción de células enviando señales que indican cuándo ésta debe detenerse. En el caso de la Estas células anormales se reproducen muy rápidamente y no funcionan como glóbulos blancos sanos, cuya tarea es combatir las infecciones. Cuando los glóbulos blancos inmaduros, llamados blastos, comienzan a desplazar a las células sanas de la médula ósea, el niño experimenta los síntomas de la leucemia (infecciones, anemia, sangrado).
¿A QUIENES AFECTA LA LEUCEMIA?
¿CUALES SON LOS SÍNTOMAS DE LA LEUCEMIA?
Debido a que la leucemia es el cáncer del tejido que produce las células sanguíneas, los síntomas iniciales generalmente se relacionan con el funcionamiento irregular de la médula ósea. Ésta es la responsable de almacenar y producir alrededor del 95% de las células sanguíneas, incluidos los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las plaquetas.
Cuando se presenta la leucemia, los glóbulos blancos anormales (blastos) comienzan a reproducirse muy rápidamente, desplazan a las demás células sanas y compiten con ellas por los nutrientes y el espacio. A continuación se enumeran los síntomas más comunes de la leucemia. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:
ANEMIA:
La anemia se presenta cuando la médula no puede producir glóbulos rojos debido a la gran concentración de células en ella. Las características de un niño con anemia son su aspecto de cansancio, palidez y respiración acelerada para compensar la disminución de la capacidad de transporte de oxígeno. En un recuento sanguíneo, la cantidad de glóbulos rojos será inferior a lo normal.
Sangrado y moretones:
Cuando la médula no puede producir plaquetas debido a la gran concentración de células que hay en ella, pueden presentarse sangrados o moretones con mayor facilidad. Las petequias son diminutos puntos rojos en la piel del niño con una cantidad insuficiente de plaquetas. Son pequeños vasos sanguíneos que han "goteado" o sangrado. En un recuento sanguíneo, la cantidad de plaquetas será inferior a lo normal. El término con que se denomina el bajo nivel de plaquetas es trombocitopenia.
Infecciones recurrentes:
Si bien el recuento sanguíneo de un niño con leucemia puede arrojar una cantidad inusitadamente alta de glóbulos blancos, estos son inmaduros y no pueden combatir las infecciones. El niño puede haber tenido infecciones virales o bacteriales repetitivas en las dos semanas anteriores. Una persona con leucemia generalmente manifiesta los síntomas de una infección como por ejemplo, fiebre, goteo nasal y tos.
Dolor en los huesos y las articulaciones:
Los dolores en los huesos y las articulaciones son otros síntomas comunes de la leucemia. Generalmente, este dolor es consecuencia de que la médula está superpoblada y "llena".
Dolor abdominal:
Los dolores abdominales también pueden ser un síntoma de la leucemia. Las células de la leucemia pueden acumularse en los riñones, el hígado y el bazo, y generar el agrandamiento de estos órganos. El dolor abdominal puede provocar que el niño pierda el apetito y peso.
Inflamación en los ganglios linfáticos:
El niño también puede presentar inflamación en los ganglios linfáticos que se encuentran debajo de los brazos, la ingle, el pecho y el cuello. Los ganglios linfáticos son los responsables de filtrar la sangre. Las células de la leucemia pueden acumularse en los ganglios y provocar una inflamación.
Dificultad para respirar (disnea):
En los casos de ALL de células T, las células tienden a aglomerarse alrededor del timo. Esta masa de células en el centro del pecho puede causar dolor y dificultad para respirar (disnea). La sibilancia, la tos o el dolor al respirar requieren de atención médica inmediata.